La campaña del miedo que está llevando adelante este gobierno es atroz. Han puesto todos los recursos estatales (de los ciudadanos) para mentirle a la gente, asustándola y metiéndole miedo para que no voten a Milei.
Con la complicidad de medios de comunicación y de los políticos corruptos que se benefician de este sistema.
En las intendencias, los municipios y en muchas oficinas estatales los cabecillas que succionan de la teta del estado le están diciendo a los empleados públicos que no van a cobrar su sueldo si gana Milei o que no van a poder pagarles. Están haciendo terrorismo de estado.
La Libertad Avanza se está enfrentando a un aparato gigantesco de propaganda, extorsión, corrupción y manipulación hacia el ciudadano.
El sistema clientelar es tan corrupto y amañado que el sistema que armó el kirchnerismo está tratando de asustar a la gente para que no voten a Milei.
Pero Milei va a ganar, buena y férrea fiscalización mediante. Aunque se esté pergeñando un fraude descomunal por parte de gobierno. En el bunker de Massa saben que pierden y que los números no les alcanza y por esto están llevando adelante está campaña del terror.
Pero la verdad va a triunfar, porque los sistemas corruptos se caen por su propio peso. No se puede sostener nunca una estructura tan frágil y endeble como la que ha armado el kirchnerismo que tiene como autora de este desfalco a la multimillonaria Cristina Fernández de Kirchner.
Milei se está enfrentando no solo a un sistema tan corrupto como el que tiene amañada a la Argentina, sino que su discurso ha calado más allá de nuestro país y ha golpeado al establishment del poder financiero internacional.
El poder financiero internacional no quiere a figuras como Milei, son molestos, temen el surgimiento de otro Trump, por eso los grandes medios también han salido a atacarlo. Estas figuras son molestas porque, aunque ponderen el libre mercado, no están atados a las mafias del capital del establishment globalista.
Milei es molesto para el globalismo, esta lucha no se está dando solo en el marco de un sistema corrupto como el que armó el kirchnerismo, sino que, además, Milei se enfrenta a los capitales internacionales, aunque parezca inverosímil. Es decir, Milei no solo es odiado por el Grupo de Puebla y todos los socialistas de América Latina. También es odiado por algunos de los grandes capitalistas.
La historia nos recuerda que David puede vencer a Goliat, aunque no tenga un enorme aparato a su favor. Goliat parece gigante, pero es un torpe titán, con una armadura oxidada y más lento que una tortuga.
Hagamos Argentina grande de nuevo, es el desafío.