A los 13 años me llegó un libro que me voló la cabeza. El libro lo había escrito el conferencista Cornejo. Me acuerdo que me gustó tanto el libro que me lo “devoré” y lo volví a leer dos veces más. Desde aquella ocasión traté de aprender siempre. Es algo que conservo hasta el día de hoy. Siempre trato de aprender algo nuevo.
Una persona que no aprende se estanca, se vuelve predecible y monótona.
La conversación de alguien que no aprende cosas nuevas se torna aburrida porque siempre habla de lo mismo y de sí mismo. O en el peor de los casos solo habla de lo que hacen los demás y nunca de ideas o proyectos.
Lo he hecho una regla de vida. APRENDER SIEMPRE.
Leer Un libro, una biografía, un artículo, ver un video para aprender, una charla con algún experto en algún tema. Para aprender hay que ser intencional, no se puede dejar eso librado al azar.
Se trata de ponerse hábitos de lectura, hábitos para observar y siempre estar atento a las cosas nuevas que suceden a nuestro alrededor.
El mundo que nos rodea demanda que seamos capaces de aprender, desaprender y reaprender de otras maneras.
Las personas que siempre aprenden se vuelven interesantes porque pueden hablar de diversos temas. No solo basan sus palabras o charlas en un solo tema.
Qué bueno encontrarse con personas que no solo hablan monotemáticamente, sino que pueden tener amplitud en sus palabras y conceptos.
Aprender te hace un mejor líder, un mejor esposo, un mejor hijo, un mejor abuelo, un mejor trabajador, un mejor empresario, un mejor político.
Qué triste escuchar a hombres de relevancia que son chatos en sus conversaciones porque no quieren aprender, no buscan mejorar ni formarse mejor para la función que ocupan.
Aprender te da amplitud para comprender muchos temas, te da amplitud para comprender mejor a las personas y tener mayor empatía. Aprender te provee de nuevos horizontes. Aprender te da herramientas para trabajar mejor y ser más útil y funcional en lo que realizás.
Aprender enriquece tu vocabulario para no ser acotado. Aprender te brinda nuevas oportunidades para crecer. Aprender te permite conocer herramientas que pueden mejorar tu vida y la de los que te rodean.
Aprender no es patrimonio de una escuela o de una institución educativa. Aprender es el patrimonio del individuo que siempre quiere crecer y mejorar.
Aprender te expande y te permite ayudar a las personas de otras maneras.
Aprender, aprender y aprender. En épocas donde todos quieren divertirse aprender es una pepa de oro. Es el santo grial que no todos quieren perseguir.
Muchas personas quieren resultados rápidos, pero no quieren formarse ni aprender.
Aprender es el camino de la sabiduría. No hay atajos para tal camino.